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Joven desarrolla biocombustible a partir de lirio acuático

José Alberto Espejel Pérez, es un joven mexicano de 19 años de edad, estudiante del tercer semestre de Ingeniería Ambiental en la Universidad de La Salle. En entrevista para la Agencia de Noticias Científicas de Latinoamérica, mencionó que el interés por la ciencia “es algo con lo que se nace y se va presentando a lo largo del desarrollo de las personas. En mi caso, comencé a darme cuenta que me gustaba mucho investigar, saber por qué se daba tal fenómeno y así fui desarrollando mi curiosidad y mis ganas de seguir aprendiendo”.


Cuando Espejel Pérez ingresó a la preparatoria, el Centro Universitario México, fue cuando consolidó su gusto por temas científicos. A partir de un programa llamado “Jóvenes hacia la investigación” descubrió que además de estar investigando, podía aplicar el conocimiento y generar nuevo.


Para el joven mexicano, el lirio acuático es un organismo que debido a su comportamiento y su elevada tasa de reproducción, genera diversos problemas en el ecosistema que se encuentra, “aunque es cierto que tiene propiedad de filtración, llega un punto en que se satura y a partir de ahí lo consideramos problema”. Mencionó.

Foto: Víctor Silva, UNO TV

El proyecto en el que actualmente trabaja se titula “Extracción de azúcares fermentables a partir de Eicchornia crassipes” y tiene dos ejes principales: la recuperación de las zonas infestadas con lirio acuático, mediante la conversión de la planta en bioetanol.


Alberto resaltó: “Podemos hablar de beneficios en cuanto a la utilización del lirio acuático como materia prima en la producción de etanol y con ello en la mejora de las zonas afectadas, con la consecuente recuperación de actividades económicas en aquéllas. El proyecto representa una de muchas alternativas en la producción actual de etanol. En la vida cotidiana, se ha utilizado como aditivo en la gasolina o como un sustituto de ella”.


El proyecto inició en la preparatoria Centro Universitario México y a partir de ahí hubo una etapa de “lluvia de ideas”, hasta que se definió el trabajar con lirio y elaborar un producto útil: el bioetanol. Es decir, Alberto y su asesora la Dra. Norma Mireles, aplicaron un proceso análogo al del maíz o caña de azúcar para poder generar el bioetanol, en otras palabras, partieron de su estructura para romperla y generar nuevos productos. Alberto narró que durante el ciclo escolar 2014-2015 trabajaron hasta obtener los primeros resultados. “Con eso, lo presentamos en un concurso llamado ExpoCiencias Metropolitana donde obtuvimos el primer lugar y pase al nacional. En dicho evento nuevamente ganamos el primer lugar”. Detalló.


Así, entre ambas ferias de ciencias, siguieron trabajando para aumentar la eficiencia del proyecto mediante la mejora de ciertos aspectos del proceso. Actualmente, continúan trabajando en ello, pero ahora en conjunto con La Universidad La Salle. Todo con el fin de presentarlo en el Stockholm International Youth Science Seminar 2016, en diciembre próximo.

A partir de haber ganado la ExpoCiencias Nacional 2015, obtuvieron la invitación a participar en el seminario mencionado, y de estar presentes en la gala de los Premios Nobel. Ante lo anterior comentó: “Estoy muy emocionado por la oportunidad, jamás lo imaginé y estoy seguro de que será increíble vivir esta experiencia. A la vez, estoy nervioso por ser el único latinoamericano en el seminario, pero muy enfocado en hacer un papel excelente, es una gran responsabilidad”.


Sobre la importancia de su trabajo de investigación, Alberto señala que el impacto ambiental más grande del proyecto es la recuperación de las áreas afectadas por la presencia del lirio acuático, que es una de las diez plagas más agresivas en el mundo. “Lo cual es claramente una ventaja a nivel ecológico y posteriormente, con la recuperación de actividades, se verá una mejora social y económica”.


“A su vez, la más grande ventaja del uso del bioetanol como combustible, es la reducción de emisiones contaminantes a la atmósfera, en comparación con la gasolina. También puedo mencionar, que con la producción de etanol a partir de materia lignocelulósica, (la materia vegetal producida a través de la fotosíntesis que forma la estructura de las plantas, como tallos, hojas, troncos, etc…) se consigue que el dióxido de carbono se recicle en mayor o menor proporción”. Estableció el joven científico.


Actualmente, el proyecto sigue en su etapa de experimentación a nivel de laboratorio, es decir, se ha ideado el proceso adecuado para tratar al lirio y ahora analizan cada parte para eficientarlo. Están por terminar el análisis y posteriormente reunirán los nuevos resultados para reinventar el proyecto.

Jose Alberto Espejel Pérez Foto: Víctor Silva, UNO TV

A los jóvenes que tienen interés en la ciencia, José Alberto les dice:

“No se detengan en cuanto a generar ideas y mucho menos que la gente los detenga diciendo que son ideas sin sentido; sean curiosos y no pierdan la capacidad de asombrarse en la vida. Si una persona está lo suficientemente interesada en lo que hace, lo que se puede obtener no tiene precio, por eso, si les gusta la ciencia, el desarrollo de proyectos los llevará a descubrir y a llenar esa pasión que pueden tener. Puedo atreverme a ponerme de ejemplo de que uno llega hasta donde uno quiere y lo que obtienes puede ser inesperado, pero muy gratificante”.


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