Adiós a una especie de los pinzones de Darwin

Una de las trece especies de pinzones (Geozpiza fortis; ave de la familia Thraupidae) con las que trabajó Darwin durante su visita a las Islas Galápagos podría extinguirse dentro de 50 años a causa de la mosca Philornis downsi, según estudios realizados por ecólogos de la Universidad de Utah.

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De acuerdo con los investigadores, las moscas fueron introducidas en las Islas Galápagos en la década de 1960, pero su impacto negativo sobre los pinzones de la Isla de Santa Cruz comenzó a inicios de los años 90´s. El problema radica en las moscas adultas, ya que éstas ponen sus huevos en los nidos de las aves y luego, las larvas que salen de los huevos se alimentan de la sangre y el tejido de los polluelos recién nacidos, provocándoles anemia y en última instancia la muerte. Este fenómeno ocasionará la extinción de los pinzones dentro de medio siglo. Para llegar a esta conclusión el equipo de científicos desarrolló un modelo matemático que predice el tiempo de extinción de los pinzones de la especie G. fortis bajo el efecto del parasitismo de la mosca P. downsi.

Polluelo de Geospizafortis aniquilado por Philornisdownsi. Fotografías cortesía de Jennifer Koop, Universidad de Utah.

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Su análisis comenzó desde 2010. Primero calcularon el nivel de supervivencia de los polluelos bajo tres condiciones ambientales anuales: estación lluviosa, de sequias y un período de carácter neutro donde la cantidad de días lluviosos y calurosos son iguales. De esta manera, obtuvieron que los pinzones tienen mayor éxito de sobrevivir en condiciones lluviosas, ya que durante este período hay mayor cantidad de alimento. Por otra parte encontraron que durante la sequía, los polluelos mueren por la escasez de alimentos, mientras que para el periodo neutro más del 60% de aves sobreviven. Posteriormente agregaron al modelo la prevalencia de la mosca sobre los nidos de las aves para cada condición ambiental, con la finalidad de modelar el efecto futuro de la mosca sobre la población de G. fortis.

Ante los tres escenarios planteados, encontraron que durante la sequía los pinzones se extinguirán después de 50 años de convivencia con la mosca parasita. Mucho más rápido que en los escenarios restantes debido a la escasez de alimentos y a la prevalencia de las moscas. En condiciones neutras, se espera que las aves se extingan 80 años más tarde y bajo condiciones lluviosas se estimó que la población de pinzones crecerá un 96% y se extinguiría en 240 años.

Este estudio demuestra el riesgo que representa la mosca P. downsi para la población de pinzones de la isla. Con el objetivo de evitar su futura extinción, el equipo sugiere monitorear los nidos y alimentar a los polluelos durante la sequía para asegurar la supervivencia de esta especie. Además, proponen modelos de gestión encaminados a reducir la prevalencia del parásito. Los científicos aseguran que es necesario tomar medidas en el asunto para conservar esta especie.