top of page

Veneno amigable.

El mejor laboratorio bioquímico de nuestro planeta está en la naturaleza. El origen de gran parte de los medicamentos que están en nuestro botiquín proviene de las sustancias químicas de plantas, animales, hongos, y otros organismos.

En Brasil el nuevo descubrimiento de un grupo de investigadores encabezado por el Instituto de Biociencias de la Universidad Paulista en colaboración con la Universidad de Leeds en el Reino Unido, reveló que el veneno de una avispa que habita en el Sudeste de Brasil podría ser una nueva opción en la lucha contra el cáncer.



La avispa Polybia paulista, tiene un veneno que además de provocar un picadura muy dolorosa ha interesado a científicos desde hace tiempo. Se descubrió que esta especie usa su veneno para mantener lejos a las bacterias de sus nidos. Su veneno es muy complejo, y tiene muchas cadenas de aminoácidos (péptidos) que han revelado propiedades únicas. La efectividad en su actividad antibacteriana fue lo que en un principio llamó la atención de los científicos.


En el 2008, investigadores Chinos descubrieron que uno de estos péptidos denominado MP1 no funcionaba como estas moléculas tienden a funcionar en los venenos comunes. Generalmente en estas sustancias tóxicas, los péptidos atacan las células al parejo, destruyendo sus membranas por igual, sin embargo este péptido ataca solamente a las células tumorosas.


En entrevista para el periódico El País, para la columna de Ciencia escrita por Miguel Ángel Criado -muy recomendable- uno de los coautores Joao Ruggiero Neto explicó “Tanto la acción bactericida como la antitumoral están relacionadas con la capacidad de este péptido para inducir filtraciones en las células al abrir los poros o fisuras en la membrana celular". El proceso de selección tiene que ver con la carga electrostática. Riggiero Neto agrega “Como el MP1 es catiónico (tiene carga positiva) y tanto las bacterias como la membrana de las células tumorales tienen lípidos aniónicos (carga negativa)”, es entonces que el péptido es atraído hacia las paredes celulares, cargas opuestas se atraen e iguales se repelen.


La porosidad de las células permite el intercambio de nutrientes. Sin embargo, en las células tumorales la pared se ve debilitada haciéndola más permeable. Este péptido actúa en segundos formando grandes poros, destruyendo la membrana celular tumoral.


La posibilidad de terapias combinadas podría ofrecer nuevas estrategias en los tratamientos contra del cáncer. Paul Beales, quien participó en la investigación por parte de la Universidad de Lees ha comentado que este péptido (MP1) “Podría ser de gran utilidad en el desarrollo de nuevas terapias combinadas, en las cuales se usan diversos fármacos simultáneamente para tratar el cáncer, atacando diferentes partes de la célula cancerosa a la vez”.

Artículo publicado en el Biophysical Journal

http://goo.gl/47ff1R

Publicaciones
destacadas
Publicaciones recientes
Archivo
Siguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
Buscar por Tags
No hay tags aún.
bottom of page