Escarbando la ciencia y el arte IMPLANTE
Muchos lugares o detalles en nuestro entorno parecen estáticos, como si el tiempo se detuviera durante su curso o estadía. Mientras los niños juegan en el parque, damos un paseo y nos sentamos frente a una fuente, compartimos un helado o un rosado algodón de azúcar, observamos gente que va y viene en todas direcciones, sentimos como transcurre el tiempo conforme interactuamos y notamos el curso del sol. Sin embargo, otra parte de esta realidad no está visible mientras andamos de paseo, pues sería poco probable que se diera un recorrido hacia el subsuelo. En lugar de caminar sobre el pavimento, la fantasía de poder atravesarlo es indiscutiblemente incitadora. Descubrir que en ese escondido lugar existen innumerables historias que conocer, incluso historias de hace millones de años.
La relación del humano con el suelo y los recursos que se encuentran en él, es más estrecha de lo que podemos imaginar. Incluso en la actualidad es común que se escuche discutir sobre el impacto de los seres humanos en cuanto al aprovechamiento de recursos minerales (oro, plata, etc.) y energéticos (petróleo, gas natural, etc.). En torno a esto, la Bienal de las Américas comisionó a la artista Marcela Armas, quien propuso el proyecto Implante para representar cómo la raza humana deja su huella durante el desarrollo de las sociedades en el planeta.
“Implante es un proyecto de intervención en la Geología de Denver y la Ciudad de México, basado en el intercambio de suelo entre las dos ciudades. Un tipo de cirugía en la Tierra que explora la confluencia de dos escalas de tiempo: tiempo geológico como un sedimento en el subsuelo y la escala del tiempo humano que muestra un cambio radical en el planeta…”
Marcela Armas, 2015
En este proyecto se recurre al lenguaje geológico, el cual extrae información a través de muestras de suelo y roca obtenidos mediante una perforación en el suelo, conocido como núcleo entre los profesionales de las Ciencias de la Tierra.
El pasado mes de julio se llevó a cabo la extracción del núcleo en el Commons Park ubicado en la ciudad de Denver y el 2 de agosto se realizó el mismo proceso en Casa del Lago que se encuentra en el Bosque de Chapultepec, Ciudad de México. La exploración en este caso llegó a más de 30 metros de profundidad. En Casa del Lago se mostraron los núcleos provenientes de Denver, los cuales fueron transportados por tierra en una travesía registrada en fotografía y video.
Para entender la historia del subsuelo en donde descansan ambas ciudades se solicitó la asesoría científica de Geólogos tanto en Denver como en México (UNAM) para poder descifrar la información codificada en millones de años. Los especialistas han descrito las variaciones en tipo y composición de minerales, lo cual permite dar seguimiento a la evolución de estos sitios a lo largo del tiempo geológico. Al final de este mes de agosto los núcleos serán intercambiados e implantados en el pozo resultante en cada ciudad.
Intercambiar suelo y rocas de un lugar a otro durante este proceso para Marcela significa y representa como los seres humanos dejamos una marca en nuestro entorno, como recurrimos a herramientas para asignar valor de la materia para clasificarla y así, otorgar importancia como un componente rentable dentro de un sistema. Tal vez, no encontramos respuestas convincentes y todo esto nos lleva a cuestionarnos sobre más cosas, pero lo que es innegable en este proyecto y esta realidad, es que las historias que se construyen en diferentes escalas, prácticas y disciplinas nos dotan de libertad para construir nuestra propia historia, precisamente esto es lo que enriquece proyectos como este, en el que la ciencia y el arte pueden interactuar para compartir y construir realidades.
Conoce más sobre el proyecto Implante y las actividades de la Bienal de las Américas en los siguientes enlaces:
www.biennialoftheamericas.org
implant.biennialoftheamericas.org
